Posicionamiento de la Asociación de Instituciones Electorales de las Entidades Federativas (AIEEF) sobre el presupuesto para la organización de elecciones locales de 2024.
La organización de elecciones en nuestro país está a cargo de organismos autónomos desde hace aproximadamente 30 años. Entre las características que definen su autonomía está la de contar con patrimonio propio, que, a su vez, se conforma por aquellos bienes necesarios para el cumplimiento de su objeto y, además, por las partidas presupuestales que anualmente se señalen en el Presupuesto de Egresos para el correcto ejercicio de sus atribuciones.
Desde la instauración del Sistema Nacional Electoral por reforma constitucional de 2014, hay una concurrencia de facultades del Instituto Nacional Electoral y de los institutos locales; sin embargo, cada autoridad debe realizar sus propias actividades para que una elección pueda celebrarse, si alguna no cumpliera lo que le corresponde, no habría posibilidad de hablar de elecciones transparentes y confiables.
Así pues, previo a un año de elecciones, cada institución electoral local realiza su anteproyecto de Presupuesto de Egresos basada en parámetros constitucionales y legales, a fin de determinar el costo económico para que TODA LA CIUDADANÍA esté en aptitud de ejercer su derecho al sufragio de manera personal, libre, secreta y directa; donde se contemplan desde la adquisición de insumos materiales, hasta la contratación de un importante número de ciudadanas y ciudadanos que se suman a la organización de la elección.
Debe señalarse también que, contar con recursos suficientes constituye un medio para garantizar a la ciudadanía que las instituciones electorales actuarán con independencia, esto es, que en sus decisiones no habrá injerencia de otros poderes o actores políticos.
Ahora bien, la legislación que regula la elaboración del Presupuesto de Egresos, tanto a nivel federal como local, establece que deberán aplicarse principios como los de eficiencia, racionalidad, austeridad y honradez, los cuales rigen igualmente para las instituciones electorales. Esto significa que cada proyecto de presupuesto de los órganos de la materia se desarrolló bajo criterios de ley y que su ejercicio está sujeto a rendición de cuentas.
Ante tal panorámica, desde la Asociación de Instituciones Electorales de las Entidades Federativas, hacemos un llamado al Poder Ejecutivo y Legislativo de cada entidad federativa para que, en la revisión de los proyectos de Presupuesto de Egresos de las instituciones electorales, se considere la importante función de Estado que se habrá de realizar en 2024, que implica brindar a la ciudadanía de nuestro país la oportunidad de ejercer sus derechos políticos pacíficamente en la renovación de los cargos de elección popular.
En ese sentido, deseamos externar nuestra preocupación por casos concretos en los que, en el trámite del procedimiento de aprobación del Presupuesto de Egresos en la Legislatura, se han presentado propuestas de ajuste a los anteproyectos presupuestales de los institutos que, de efectuarse, pondrían poner en riesgo el oportuno y adecuado despliegue de actividades del proceso electoral.
Por disposición legal, en la preparación, vigilancia y calificación de los procesos electorales, la ciudadanía, partidos políticos, instituciones electorales y el gobierno, son corresponsables de su correcto desarrollo y, dado que un aspecto fundamental para la organización de la elección es la disponibilidad de recursos suficientes, bajo la citada corresponsabilidad, debe priorizarse la atención a los presupuestos respectivos con la clara intención de hacer posible, una vez más, la expresión más fundamental de la democracia.
En atención a lo expuesto, quienes integramos la AIEEF estaremos atentas y atentos de la culminación del procedimiento de aprobación de los presupuestos de egresos en las entidades federativas y el cumplimiento de la responsabilidad que a cada órgano del Estado corresponde.